La experiencia humana y el fenómeno de la consciencia como tal son temas de extenso análisis y profundo entendimiento. El estudio de la materia, el concepto de energía, las eternas búsquedas religiosa y científica; de una inteligencia suprema y sagrada para la una, y de entender el misterio de la esencia del mundo fenoménico para la otra. Creacionismo o evolución? Es la búsqueda de la singularidad, del origen del universo y la esencia elemental, tanto en lo religioso como en lo científico; de la unidad en un mundo aparentemente fundamentado en la dualidad. En el origen de este dilema filosófico y brindando muchas respuestas, se encuentran las matemáticas puras y la geometría sagrada.
Tanto la unidad de la que hablamos como la dualidad corresponden al aspecto esotérico y no exotérico de los números 1 y 2 correspondientemente. Este aspecto se asemeja a lo que conocemos como el valor cualitativo y no cuantitativo de algo, de un número en este caso.
Por otra parte es importante mencionar que los números como los conocemos son un lenguaje que hemos desarrollado como especie para interpretar y comunicar el mundo de las formas en el que vivimos. En este sentido, el verdadero significado de los números se encuentra en la geometría, y más precisamente, en la geometría sagrada.
La palabra geometría proviene del griego, significa medida de la tierra. El término sagrada por otra parte, surge del Latín sacratu y se refiere a aquello que merece veneración y respeto religioso ; está asociado con una deidad o con objetos considerados divinos.
En términos reducidos, la geometría sagrada es el estudio de la relación entre el plano físico y el metafísico. Es una disciplina artística, filosófica, espiritual y científica que busca elevar el entendimiento humano, vinculando sus dos hemisferios cerebrales, hacia una comprensión intuitiva y racional del mecanismo abstracto y dinámico que sustenta todo el mundo manifiesto.
Tomemos el número 3 por ejemplo. En lugar de verlo como una cantidad de 3 unidades, podemos entenderlo dentro de su propiedad universal, la Trinidad. El valor esotérico de este número nos habla de cómo la unión de la polaridad dual del 2, crea el 3; o de cómo la unión de los arquetipos femenino y masculino es indispensable para el nacimiento de la vida. El 3 es el número que nos abre las puertas de la vida y de la existencia misma. En términos geométricos, el triángulo representa el cambio de la primera a la segunda dimensión. Es un salto radical del plano de lo no manifiesto a lo manifiesto, y es la superficie más básica de la segunda dimensión. Algo tiene que tener un mínimo de 3 puntos para existir en este plano. De la misma forma, nada que no cumpla con este requisito puede ser perceptible; ya que la unión de dos puntos corresponden a una dimensión, la línea, y 1 punto corresponde a la dimensión 0. Aquí es importante señalar que tanto la línea como el punto no tienen una existencia física real, sino por lo contrario, es metafísica, pertenecen a la dimensión mental de las ideas. Por ende, si llegan a percibir una línea o un punto con sus sentidos, es muy probable que estos contengan una superficie o un volumen mínimo, lo cual es teórica y técnicamente imposible en una línea o un punto auténticos. Es muy oportuno citar en este punto, la primera ley del Kybalion:
El Universo es mental
Visto que cada dimensión tiene su origen en la dimensión precedente, podemos deducir que la 3ra y 4ta dimensión de existencia que conocemos tienen su origen en dimensiones mentales como lo son las dimensiones primera y cero.
De la misma forma en que hablamos previamente de la trinidad y del número 3, la dualidad habla del aspecto esotérico o arquetípico del número 2. Y esto corresponde a todas las polaridades existentes tanto en el plano físico como metafísico.
Podemos hablar de la dualidad arquetipo/tipo del número o de cualquier elemento del mundo material o sutil. Hablando de una puerta, existen puertas de madera, de acero, de vidrio etc... y tienen mecanismos y diseños muy diversos, son tipos de puerta. El arquetipo de la puerta es el concepto-idea de lo que es una puerta, la razón por la cual todas las puertas existen.
Ninguno de los siguientes pares contienen una carga semántica. Generalmente atribuimos a las palabras un juicio de valor en función de la historia de la cultura y condicionamientos colectivos de nuestras sociedades, pero objetivamente, no tienen validez alguna:
Femenino / Masculino
Noche / Día
Ying / Yang
Frío / Cálido
Interno / Externo
Abajo / Arriba
Negativo / Positivo
Negro / Blanco
Curva / Recta
Morir / Nacer
Oscuridad / Luz
Causa / Efecto
Inhalar / Exhalar
Pasivo / Activo
Observado / Observador
Este principio es básico para el mundo en el que vivimos. En el Taoísmo es llamado El Principio único y es considerada una ley universal. Básicamente, el universo dinámico, macro y microcósmico en el que vivimos, no es más que un perpetuo vaivén complementario, interdependiente y coexistente de esta polaridad original presente en cada aspecto de nuestra existencia y en todas sus escalas espacio-temporales.
La dualidad es la razón por la cual percibimos el mundo como una aglomeración aleatoria de bultos de densidades diversas, aisladas y dinámicas. Es el principio raíz de una frontera, el arquetipo divisor por así llamarlo.
Dijimos previamente que tanto en el campo científico como religioso se busca entender o experimentar una gran verdad, tan única y absoluta que sea la razón de ser de todas las cosas y acontecimientos.
La Unidad o Singularidad es el aspecto esotérico o arquetípico del número 1 y su símbolo es el Círculo. Este último es la manifestación pura del infinito potencial de su punto central, del Uno. Es un punto, sin dimensión alguna, existente únicamente como un concepto intelectual pero omnipresente en el espacio y en el tiempo. El momento presente por ejemplo, representa muy bien aquel punto eterno que todo lo compone. Así como los conceptos de equilibrio, de silencio y de quietud. Hermes Trimegisto, padre legendario de la alquimia, de la astrología y de las 7 leyes universales del Kybalión dijo:
"Dios es una esfera inteligible cuyo centro está en todas partes y su circunferencia en ninguna"
La Unidad se refiere al Todo, a aquello que no conoce dualidad, infinito y eterno, inmutable, la conciencia, la existencia misma, el Amor, el Espíritu, el Ser, Dios.
De esta forma la geometría sagrada nos permite penetrar de forma matemática y pragmática a los planos de construcción de la realidad como tal. Ya que, tanto lo medible y manifestado como lo inefable e imperceptible, son de naturaleza geométrica. Podemos tomar por ejemplo la estructura molecular cúbicamente fractal de la sal, así como la frecuencia vibratoria de una emoción o pensamiento, o el tiempo cíclico en el cual nos desenvolvemos; todo responde a patrones geométricos vibrantes y a estructuras sistémicas y orgánicas.
Los números son como la palabra y la geometría sagrada su significado.
Pedro Emmanuel A.
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